CLÍNICA ESTOMATOLÓGICA DOCENTE
ÁREA NORTE
MORÓN
Láser de baja potencia en la cicatrización de heridas
Low power laser in wound healing
Vivian Sahily Pérez MoralesI, Miguel Atilano Peñaranda CalzadoII, Julio Cesar Torres NievesIII.
RESUMEN
Introducción:
el láser de baja potencia se utiliza ampliamente en la práctica
médica actual. Numerosas afecciones agudas y crónicas son
tratadas con esta terapia, con resultados alentadores y muchas veces
superiores a los obtenidos con tratamientos convencionales.
Objetivo:
presentar el caso de un paciente con herida quirúrgica tratada con
láser de baja potencia de arseniuro de galio y aluminio, de
interés por los buenos resultados obtenidos como opción
terapéutica.
Presentación del caso:
paciente masculino de 52 años de edad. Fue intervenido
quirúrgicamente de un quiste sebáceo localizado en la espalda.
Con anteriorioridad recibió tratamiento antibiótico debido al
absceso. La herida se dejó abierta para permitir su cierre por segunda
intención. El paciente solicitó tratamiento coadyuvante para la
cicatrización de la herida y mejoramiento de sus condiciones
estéticas. Se le indicaron 15 sesiones de laserterapia, de las que
recibió 12.
Discusión:
el pronóstico de la cicatrización de la herida es de importancia
tanto para el paciente como para el cirujano. La cicatrización por
segunda intención ocurre cuando hay pérdida de sustancia en la
contigüidad del tejido (lo que dificulta enfrentar los bordes de una
herida) o cuando existe compromiso infeccioso en la lesión. La
aplicación del láser durante el curso del proceso cicatricial
además de mejorar el aspecto final del tejido, previene las
complicaciones propias de la cicatrización.
Conclusiones:
por sus buenos resultados, el empleo del láser de baja potencia de
arseniuro de galio y aluminio es una opción terapéutica para
lograr la cicatrización por segunda intención de las heridas
quirúrgicas.
Palabras clave:
TERAPIA POR LÁSER, TERAPIA POR LUZ DE BAJA INTENSIDAD, LÁSERES
SEMICONDUCTORES/uso terapéutico, CICATRIZACIÓN DE HERIDAS/efectos
de radiación, INFORMES DE CASOS.
ABSTRACT
Introduction:
the low power laser is widely used in current medical practice. Numerous
acute and chronic conditions are treated with this therapy, with
encouraging results and many times higher than those obtained with
conventional treatments.
Objective:
to present the case of a patient with a surgical wound treated with a low
power laser of gallium arsenide and aluminum, of interest for the good
results obtained as a therapeutic option.
Case presentation:
male patient of 52 years of age. He underwent surgery for a sebaceous cyst
located on his back. Previously, he received antibiotic treatment due to
abscess. The wound was left open to allow closure by second intention. The
patient requested coadjuvant treatment for wound healing and improvement of
his aesthetic conditions. He was given 15 sessions of laser therapy, of
which he received 12.
Discussion:
the prognosis of wound healing is important for both the patient and the
surgeon. Healing by second intention occurs when there is loss of substance
in the contiguity of the tissue (which makes it difficult to face the edges
of a wound) or when there is an infectious commitment in the lesion. The
application of the laser during the course of the healing
process in addition to improving the final appearance of the tissue,
prevents the complications of healing.
Conclusions:
due to its good results, the use of the low power laser of gallium and
aluminum arsenide is a therapeutic option to achieve healing by secondary
intention of surgical wounds.
Keywords:
LASER THERAPY, LOW-LEVEL LIGHT THERAPY, SEMICONDUCTORS LASERS/therapeutic
use, WOUND HEALING/radiation effects, CASE REPORTS.
INTRODUCCIÓN
La piel es una membrana fibroelástica, considerada la "envoltura viva
del cuerpo". La cicatrización de heridas en la piel es un proceso
altamente complejo, orientado a recuperar la integridad del tejido mediante
su regeneración y la restauración de sus funciones.(1)
Aunque el fundamento de la práctica quirúrgica es la respuesta de
los tejidos vivos a la lesión, desde el punto de vista biológico
la lesión hística y sus secuelas tienen relación con la
mayoría de los problemas médicos generales.(2)
Un aspecto de suma importancia en la práctica médica es la búsqueda de procedimientos que minimicen el dolor, reduzcan la inflamación y estimulen la reparación hística sin causar muchas molestias al enfermo. El láser de baja potencia es una de las técnicas que cumple con estos requisitos. Su efecto terapéutico sobre los tejidos biológicos consiste en cambios celulares que posibilitan una rápida respuesta cicatrizal del tejido dañado.(3) Por ello su empleo se extiende con éxito a otras especialidades médicas, tanto en la modalidad de tratamiento único como combinado con otros procedimientos fisioterapéuticos o tratamiento farmacológico.(4)
El láser de baja potencia, también denominado láser blando (soft-laser), láser terapéutico o terapia láser de bajo nivel (LLLT por el inglés low level laser therapy) se utiliza ampliamente en la práctica médica actual. Numerosas afecciones agudas o crónicas son tratadas con esta terapia, con resultados alentadores y muy superiores a los obtenidos con el uso de los tratamientos convencionales.(5)
Las propiedades físicas de la radiación láser posibilitan la obtención de variados efectos terapéuticos en los tejidos vivos, tales como analgesia en la zona irradiada, equilibrio del potencial de membrana en reposo y del umbral doloroso (evita su descenso). Al favorecer la vasodilatación capilar el láser ejerce acción antiedematosa o antiinflamatoria, acelera la regeneración de los vasos linfáticos, aumenta el drenaje de la zona inflamada, favorece la fibrinólisis e interactúa sobre los procesos de tabicación. Su acción cicatrizal de heridas y diversos traumatismos se debe a que aumenta el índice de mitosis celular, activa la síntesis proteica y, por lo tanto, la función celular. Todo ello estimula los procesos de epitelización, tanto en la piel como en otros tejidos.(3,5-6).
El objetivo del presente trabajo es presentar el caso de un paciente con herida quirúrgica, tratado con láser de baja potencia de arseniuro de galio y aluminio (AlGaAs), de interés obtenidos como opción terapéutica.
PRESENTACIÓN DEL CASO
Paciente masculino, de 52 años de edad, tez trigueña y
procedencia urbana, sin antecedentes patológicos personales ni
familiares, tampoco hemorrágicos o de reacción a medicamentos.
Fue intervenido quirúrgicamente de un quiste sebáceo, de 3 cm
aproximadamente, localizado en la espalda y anteriormente abscedado, por lo
que el cirujano le indicó tratamiento antibiótico oral. La herida
se dejó abierta para permitir la cicatrización desde los planos
inferiores hacia la superficie (cierre por segunda intención).
Transcurridos siete días el paciente acudió voluntariamente al Servicio de Laserterapia de la Clínica Estomatológica Docente del municipio Morón para solicitar tratamiento coadyuvante para la cicatrización de la herida y mejoramiento de sus condiciones estéticas. En el examen físico se observó una herida quirúrgica abierta, de 3,5 cm de diámetro, forma redondeada y poca profundidad, que afecta la dermis, con escasa formación de tejido de granulación, moderada presencia de exudado, y enrojecimiento de la zona que la rodea. El enfermo refirió no sentir dolor (figura 1).
Figura 1. Aspecto de la lesión siete días después de la intervención quirúrgica y antes de iniciar el tratamiento con láser.
Se le indicó laserterapia (15 sesiones de tratamiento), para lo cual se le informó debidamente y se obtuvo su consentimiento. En las sesiones terapéuticas se empleó un equipo FISSER-21 clase III-B (de fabricación cubana), tipo arseniuro de galio y aluminio (AlGaAs).(5-7) El tratamiento consistió en la aplicación diaria de láser tipo rojo, con una frecuencia de 50 Hz, dosis energética de 8 J/cm² (dosis de reparación hística) y técnica puntual local. Se irradiaron puntos situados a 1 cm de distancia en todo el borde de la lesión y en el centro. Se empleó la técnica zonal (barrido) sobre toda la lesión y su periferia.
A los seis días de tratamiento se observó reducción de la lesión a aproximadamente 1,5 cm de diámetro, con aproximación de los bordes, formación de tejido de granulación, ausencia de secreción, y diminución del enrojecimiento de la zona circundante (figura 2).
Figura 2. Estado de la lesión seis días después de iniciada la laserterapia.
Después de la duodécima sesión de láser el paciente presentó una evolución favorable, con notable recuperación de tejido en la zona y la lesión prácticamente cicatrizada, con los bordes enfrentados en casi su totalidad y formación de tejido cicatrizal de color pálido (figura 3).
Figura 3. Estado de la lesión 12 días después de iniciada la laserterapia.
Esta fue la última sesión de tratamiento, debido a que el paciente solicitó ser dado de alta del servicio al tener que trasladarse, por razones de trabajo, a otra provincia durante un mes. Acudió a consulta tres meses después de concluida la irradiación con láser para verificar su evolución. Se observó mejor epitelización de la herida, recuperación de la pigmentación y textura normales de la piel en la zona y una cicatriz más estética (figura 4).
Figura 4. Estado de la lesión a los tres meses de terminado de irradiar el tejido.
DISCUSIÓN
Los quistes sebáceos se encuentran entre las lesiones quísticas
más frecuentes de la piel, por lo que son motivos de consulta tanto
para el médico general como para el resto de los médicos
especializados.(8) La presencia de estos quistes genera
preocupaciones en la persona que los padece debido a que en ocasiones
interfieren con su estética. El tratamiento consiste en la
extirpación quirúrgica del quiste con su cápsula.(9)
El pronóstico de la cicatrización de la herida es de importancia tanto para el paciente como para el cirujano.(2) La cicatrización por segunda intención ocurre cuando hay pérdida de sustancia en la contigüidad del tejido y por tanto, dificultad para enfrentar los bordes de una herida o cuando existe compromiso infeccioso en la lesión.(10,11) La curación de una herida por segunda intención implica la formación de mayor cantidad de tejido de granulación, cuya cobertura definitiva se producirá a expensas del tejido cicatrizal con una fina capa de epitelio que saltará, a modo de puente, en el espacio establecido entre los bordes cutáneos separados en un principio. El tejido de granulación contiene miofibroblastos que cierran la herida por contracción. El proceso de cicatrización es lento, y puede ser necesario tratar el exceso de granulación que se destaca en los márgenes de la herida mediante el retardo de la epitelización.(2)
El empleo del láser de baja potencia como opción terapéutica en la regeneración hística posibilita reducir el tiempo de cicatrización, mejorar la evolución clínica de los pacientes y su calidad de vida durante el curso de cualquier enfermedad.(6-7,12) Los efectos terapéuticos del láser en la práctica médica y estomatológica están avalados por los resultados investigativos de autores nacionales y extranjeros.(11-13,15) Estudios clínicos recientes evidencian que aplicar láser durante el curso del proceso cicatrizal además de mejorar el aspecto final del tejido, previene las complicaciones propias de la cicatrización.(11)
Según Garrigó Andreu y Valiente Zaldívar(13,14) la acción de reparación hística mediante el láser de baja potencia se basa en varios procesos. Entre ellos la activación del endotelio vascular y la producción de colágeno y fosfatasa alcalina, el aumento -guiado y organizado- de las fibras colágenas y elásticas, y la regeneración de vasos y fibras nerviosas. A esto se añade el incremento de la velocidad de crecimiento de los vasos sanguíneos a partir de los ya existentes y la inducción de la reepitelización en las células epiteliales adyacentes a la lesión. Sin embargo, el incremento de la multiplicación celular es la esencia del proceso reparador.
Esta terapia se indica para cualquier dolencia entre cuyos síntomas estén la inflamación, el dolor o trastornos de la reparación hística.(3) Por muy inocuo que sea un procedimiento terapéutico, siempre tendrá contraindicaciones absolutas o relativas, según los criterios de las diferentes escuelas.(5,6,12) En este caso, el paciente no tuvo reacciones adversas, lo que confirma los recogido en la literatura acerca de sus beneficios con riesgos mínimos y pocos efectos indeseables.(3,6,7,14)
CONCLUSIONES
El tratamiento aplicado en el caso de este paciente fue efectivo. Por sus
buenos resultados, el empleo del láser de baja potencia de arseniuro
de galio y aluminio es una opción terapéutica para lograr la
cicatrización por segunda intención de las heridas
quirúrgicas.
Conflictos de intereses
Los autores declaran que no existen conflictos de intereses.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Recibido: 21 de noviembre de 2016
Aprobado: 1 de marzo de 2017
MsC. Vivian Sahily Pérez Morales Clínica Estomatológica Docente Área Norte Calle Máximo Gómez No.257 s/n, esquina Agramonte. Morón. Ciego de Ávila, Cuba. CP.67220 Correo electrónico: vperezmorales@moron.cav.sld.cu |